La arqueología resuelve el misterio del desembarco de Eneas
Blog nº 32
1 artículo
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Las nuevas investigaciones que se están desarrollando en este enclave del Salento (nombre con el cual se indica la zona geográfica del extremo sur de la Puglia) concuerdan en que se trata del puerto descrito por Virgilio en el tercer libro de La Eneida.
Todas las personas que han leído o estudiado la obra virgiliana saben que el héroe troyano Eneas, tras escapar de la ciudad de Troya y vivir varias peripecias logra desembarcar en la península Italiana. El lugar donde el héroe troyano desembarcó viene descrito en la obra virgiliana, en el tercer libro, con las siguientes palabras: Las codiciadas brisas crecen y el puerto se abre y sobre una roca aparece el templo de Minerva.
Reconstruyendo el viaje de Eneas muchas personas apasionadas y conocedoras de la gesta del héroe troyano han intentado ubicar el puerto en cuestión. Desde el principio todos los estudios concordaron en que el puerto debería encontrarse en el Salento, precisamente en la costa sur oriental. Como candidatos se consideraron un abanico de enclaves: Castro, Otranto, Porto Badisco y Leuca.
Muchos expertos han analizado meticulosamente las palabras de Virgilio para encontrar una referencia que revelara de una vez por todas cuál de estas ciudades fue el escenario de la llegada de Eneas. El poeta habla de hecho de un puerto, cerca de una montaña en cuya cima se encontraba un templo dedicado a Minerva. Esta descripción llevó a pensar que podía tratarse de Otranto. Sin embargo Castro fue una colonia romana conocida con el nombre de Castrum Minervae y también poseía un templo dedicado a la diosa Minerva. De hecho en los últimos años los estudios arqueológicos han dado a los amantes de la mitología un verdadero giro.
Las campañas de excavación dirigidas en 2007-2008 por el director de la escuela de especialización en arqueología de la universidad de Lecce Francesco d´Andria han revelado elementos determinantes. Una muestra de ello son los restos de un templo dedicado a la diosa Minerva que junto con las poderosas cintas murarias que datan de entre los siglos IV y III a.C. hacen de Castro el puerto descrito en La Eneida de Virgilio, lugar donde desembarcó de Eneas.
Esta tesis fue definitivamente confirmada por los hallazgos que se realizaron en la campaña arqueológica llevada a cabo en el 2015 bajo la dirección del arqueólogo Amedeo Galati, con el descubrimiento del torso de una estatua de la diosa Minerva coeva al periodo histórico descrito en La Eneida.
Una vez más la arqueología nos ha ayudado a resolver uno de los misterios de La Eneida y a respetar las fuentes literarias que describen el pasado de las civilizaciones como una de las formas que tenían éstas para recordar a sus ancestros.
Andrea Vincenti. Arqueólogo y cooperante. Viajero y Knowmad.
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Reconstruyendo el viaje de Eneas muchas personas apasionadas y conocedoras de la gesta del héroe troyano han intentado ubicar el puerto en cuestión. Desde el principio todos los estudios concordaron en que el puerto debería encontrarse en el Salento, precisamente en la costa sur oriental. Como candidatos se consideraron un abanico de enclaves: Castro, Otranto, Porto Badisco y Leuca.
Muchos expertos han analizado meticulosamente las palabras de Virgilio para encontrar una referencia que revelara de una vez por todas cuál de estas ciudades fue el escenario de la llegada de Eneas. El poeta habla de hecho de un puerto, cerca de una montaña en cuya cima se encontraba un templo dedicado a Minerva. Esta descripción llevó a pensar que podía tratarse de Otranto. Sin embargo Castro fue una colonia romana conocida con el nombre de Castrum Minervae y también poseía un templo dedicado a la diosa Minerva. De hecho en los últimos años los estudios arqueológicos han dado a los amantes de la mitología un verdadero giro.
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Esta tesis fue definitivamente confirmada por los hallazgos que se realizaron en la campaña arqueológica llevada a cabo en el 2015 bajo la dirección del arqueólogo Amedeo Galati, con el descubrimiento del torso de una estatua de la diosa Minerva coeva al periodo histórico descrito en La Eneida.
Una vez más la arqueología nos ha ayudado a resolver uno de los misterios de La Eneida y a respetar las fuentes literarias que describen el pasado de las civilizaciones como una de las formas que tenían éstas para recordar a sus ancestros.
Andrea Vincenti. Arqueólogo y cooperante. Viajero y Knowmad.
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